lunes, 19 de enero de 2015

Recomendado por... Un entomólogo


LAS MOSCAS

Vosotras, las familiares,
inevitables golosas,
vosotras, moscas vulgares,
me evocáis todas las cosas.

¡Oh, viejas moscas voraces
como abejas en abril,
viejas moscas pertinaces
sobre mi calva infantil!

¡Moscas del primer hastío
en el salón familiar,
las claras tardes de estío
en que yo empecé a soñar!

Y en la aborrecida escuela,
raudas moscas divertidas,
perseguidas
por amor de lo que vuela,

—que todo es volar—, sonoras
rebotando en los cristales
en los días otoñales…
Moscas de todas las horas,

de infancia y adolescencia,
de mi juventud dorada;
de esta segunda inocencia,
que da en no creer en nada,

de siempre… Moscas vulgares,
que de puro familiares
no tendréis digno cantor:
yo sé que os habéis posado

sobre el juguete encantado,
sobre el librote cerrado,
sobre la carta de amor,
sobre los párpados yertos
de los muertos.

Inevitables golosas,
que ni labráis como abejas,
ni brilláis cual mariposas;
pequeñitas, revoltosas,
vosotras, amigas viejas,
me evocáis todas las cosas.

            Antonio Machado (Soledades, Galerías y otros poemas, 1907)



LA MOSCA

Pequeña Mosca,
Juego del verano
Mi mano sin pensar
Te ha barrido de mi lado.

¿No soy yo
Una mosca como tú?
¿O no eres tú
Un hombre como yo?

Porque yo bailo
Y bebo y canto,
Hasta que una ciega mano
Habrá de barrer mi ala.

Si el pensar es vida
Y fuerza y aliento,
Y la voluntad
De pensar está muerta.

Entonces soy yo
Una mosca feliz
Si vivo
O si muero.

          William Blake (Cantos de Experiencia, 1794)



AL MOSQUITO DE LA TROMPETILLA

Ministril de las ronchas y picadas,
Mosquito postillón, Mosca barbero,
Hecho me tienes el testuz harnero
Y deshecha la cara a manotadas.

Trompetilla que toca a bofetadas,
Que vienes con rejón contra mi cuero,
Cupido pulga, Chinche trompetero
Que vuelas comezones amoladas,

¿Por qué me avisas si picarme quieres?
Que pues que das dolor a los que cantas,
De Casta y condición de potras eres.

Tú vuelas y tú picas y tú espantas
Y aprendes del cuidado y las mujeres
A malquistar el sueño con las mantas.

                     Francisco de Quevedo

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¿Qué te parece?